Hogar;

"Mientras tanto con un temor dulcemente ansioso, miro por la ventana aquella neblina oscureciendo resplandeciente las calles y abrigo las ideas para traerte a mi hogar, perdido entre muchos adornos vivos, con suelo carnoso enrojecido y cúpulas que encierran sin esquinas a quién allí entra." 
Este es un momento para detenerlo. Me encontraba en la mitad de un día frío, en medio de las estaciones gélidas. Hoy finaliza el mes flemático y mañana comienza el mes melancólico. Sin embargo, ambas razones de subsistencia, creían en que muy pronto, al finalizar la temporada, llegaría algo a cambiar mi vida. Ha sido un tiempo amable para descansar, mientras mi cuerpo se mueve al son de las obligaciones y responsabilidades, mis pies se estacan a la tierra, y contrariamente mi cabeza se empeña en llevarme a lugares mas allá del norte europeo pero más cercano al firmamento ártico. Escribo esto, 1. Porque el día está ideal para tomarse este té de arándano y 2. Porque me ha gustado la idea de vivir el día a día, más relajado, silente y franco. Los planes para renovar energías comenzando el tan anhelado Invierno, será leer aquel libro que no he podido encontrar y usar esa preciosidad de camisa estirada sobre el atril. Verde, me faltaba verde, ahora me faltas tu. 


Hablando más en serio, me encanta mi Hogar, ver a mis padres alrededor de una chimenea y mis hermanos pintando sobre tablas. Me encanta sentarme entre insumos de café, camuflado bajo mi atril y sentado sobre este piso símil madera que bordea aquel plumón azul ganso. Me gusta escribirte, aunque no lo sepas y aunque yo mismo te desconozca. Me gusta sentarme con mi amigo Duke y que escuche mis evocaciones pensando en cuán incoherente y desastre sea por la vida. 

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