"Lo Olvidaba, estoy Planeando,"

Tómame, amárrame a tu pecho y no me dejes ir. Podría cantarte mientras te duermes a mi lado, acurrucarte en mi dorso y acariciar tu nariz fría y desnuda al aire de la habitación. No sé si te guste la idea, de ir a dar un par de vueltas al centro. No me gusta mucho, pero hago el intento. “¡Vamos, apúrate!”.- Te gritaría a lo lejos mientras gano la carrera alternando mis pasos entre los álamos del gran parque. Supongo que te gustará, nunca he ido, la ciudad es muy grande, podremos encontrar un verde extendido que albergue árboles en su planicie. Me gustaría después tomar un tren, que nos llevara arriba, ver esas casas grandes, modernas y geniales que salen en las películas, ver qué diferencias tienen sus tiendas a las que quedan cerca de nuestra casa, es justo allí donde podamos ver ropa para ambos, no está malo de vez en cuando ver algo de género, a veces en ella encuentras inspiración, pasearíamos de la mano con el sonido de fondo, que admite y nos tienta a comprar. Caminaría confiado como nunca antes, porque tú estás a mi lado. Eso sí, llevaría con nosotros nuestro libro favorito, escucharía tu voz armónica mientras lees pausadamente el tercer capítulo, la ventana sería mi confidente, encerraría mi sonrisa, el brillo de mis ojos, la seriedad de mis cejas y la cúpula de mi oído, alterado por la perfección de tu sinfonía. Tendría que haber viento, mucho viento, algo de frío y hojas secas, para darme el pretexto de poder abrazarte aún más fuerte y percibas el calor que se desprende de mi cuerpo. En algún momento de nuestro día apoyaría mi cabeza en tus piernas, pondría una espiga de trigo en mi boca y miraría el cielo fugaz a punto de reventar en llanto. Sí, sería perfecto. Tus ojos cual carmesí, me dirían que ya es hora de retornar a casa, te miraría con una mirada que nadie podría explicar, perdidamente enamorado. De un salto estaría en pies, tendremos que correr, porque la lluvia ya estaba sobre nosotros y bajo aquel farol, totalmente empapados nos besaremos. Bajaríamos al tren subterráneo y te acompañaría hasta la estación donde nuestros caminos se separan, y allí tú serás libre de besarme otra vez. Hey, ¿te vas?, ah lo olvidaba, sólo lo estoy planeando. No te preocupes, nos encontraremos un día, ya verás. Mientras tanto esta tasa me hará compañía, después de todo, lo que necesito está al principio. Es Moka así que lo mantendré caliente para ambos.