Año Viejo

"Aquí está tu puesto, siéntate acá, hoy eres el invitado de honor, preparé esto para despedirte, porque comenzaste rápido y te volviste agrio, y hoy sin embargo, te has vuelto sabio, como espero serlo desde mañana."


En Marzo y Abril pensé que nunca acabarías. Pero hoy, mi corto amigo quiero estrechar tu mano sin resentimientos. Estamos acostumbrados a celebrar el año nuevo, aquel que comienza tomado de tus talones y te quita el protagonismo que alguna vez tuviste, sin embargo, hoy quiero celebrarte a ti, el año viejo. He preparado esta humilde cena, porque así me he sentido -lo digo humildemente- gran parte del año me sentí pequeño, sufrible, incapaz de hacer cosas. Fue complicado y en este otoño, aquel comienzo de primavera fueron días muy amargos. Que han quedado atrás, porque hoy reconozco que me hice más fuerte, vi cosas que nadie más podía ver en mí, más que yo mismo. Siento hablar tanto de mí mismo, pero es el único lugar donde sólo me tienen que escuchar y no interrumpir. Y a pocas horas de tu deceso, quiero agradecerte porque junto al dueño del tiempo, me hicieron detener y pararme sobre el risco que me espera desde siempre. Definitivamente no vivo en el pasado, así que al igual que muchas cosas que he vivido, pasarás al abismo del olvido, y verás cómo miro el futuro, tampoco soy un hombre del presente, sólo me concentro en que mañana será mejor que ayer y hoy. No voy a negar que temo por mi vulnerable ventana al alma, que vivo mirando cada paso en el suelo porque sino sería un verdadero desastre. Una de las cosas que aprendí este año, es que no estoy hecho ni para el trabajo (lo detesto, ¿por qué no podemos vivir cada uno en su campo cultivando sólo lo que ha de comer y vestir?), ni para el aplauso falaz (gente que grita por reconocimiento ajeno). 

En fin, sólo quería despedirme, y ahogar nuestras diferencias en la estancia de estas horas, Te acompañaré en los últimos minutos de tu vida, supongo que no soy rencoroso, y te perdono por todas las cosas que permitiste en tus directrices, para algunos fuiste muy bueno y para otros...  bueno, ya lo olvidé. Sólo come, como las zanahorias estuvieron abundantes este año traje una pila, no sé cómo comen los años, así que preferí prepararlas al natural, con una salsa nogada. Hice unas brochetas de pollo serenense y tostadas francesas. Aquí está tu puesto, siéntate acá, hoy eres el invitado de honor, aunque yo nunca haya sido el tuyo. Como ves, evito todo toque de extravagancia, y como son los fuego artificiales quienes te ven nacer, traje estas breves luces para despedirte. El único sentimiento que puedo describir ahora es el de regocijo, contrito. Gracias '015, nos veremos en las memorias colectivas de todo el mundo cuando hablen de ti. Siéntete especial, has sido el primer año del cual hablo jaja, y por esto presiento que estoy loco. Adiós.

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