( Break )

"Sólo un momento de descanso, donde no exista nada, donde nadie corra, pase ni grite. Quedar acostado sobre el pasto, y contemplar la grandeza de un nuevo equinoccio. Estimado Otoño, comienzas tu temporada este año, facilita lo que anhelo, y demuestra otra vez, que mi mente y tu ciencia, sólo uno son."


Bueno, no importa si las cosas te salen mal, después de todo, no tenemos el super-poder de controlar algo, ni siquiera mover las cosas. A veces siento que todo a mi alrededor conspira para desarmar lo que he hecho ¿Cómo darte cuenta, cuando pasas la línea de vivir como querías, sí estás haciendo lo que escogiste?. Estoy muy cansado. Paso con hambre todo el día. Duermo muy poco y mal. Me levanto lento, camino apurado, llego calmado, estoy despierto pero no consciente y llego a mi casa, sólo para cumplir la rutina que funcionalmente la dinámica te armó. No tengo ánimo de salir, ósea, quiero hacerlo, pero la energía me falta, la iniciativa desaparece y todo queda en un bufido que sólo el techo escucha. PERO... Como siempre, no me quedaré así, porque mi vida es y será mucho más, y nada me faltará (fue lo que dice en sus promesas), así que no dejaré que absorban mis fuerzas, que apreten los polos de mi sonrisa para cerrar su luz. Me estaba desgastando por una causa posible, con energía inexistente. Iré al ritmo. De hecho, quiero tiempo para perder, quiero comer tanto como quiera y dejar que los minutos contemplen sus partes, examinar el color de sus formas y ver cómo esa sublime palta, brilla con el sol de un otoño en pleno equinoccio. Como unos berries restringen la atracción de los labios y cómo la sanidad de sus veredas sostendrán un circadiano para envolverse en los manteles blancos preparados para vivirlos. Quiero un tiempo, quiero un break para descansar tranquilo y contemplar lo único que realmente me conecta con el giro del globo.

Quiero acostarme en el pasto y ver las nubes de Nataniel fugándose a ras sobre el firmamento, mientras tomo agua de durazno y como pan integral con palta y cien semillas. Escuchar el movimiento de toda cosa, persona y ente que me rodeara, mientras indudablemente observaran al flemático quieto aprovechando un nuevo momento perfectamente preparado y otorgado por la paz. ESO QUIERO, ESO HARÉ.

Por cierto, no hay nada... ni pena ni gloria que no pase un buen café. El poder ancestral que detiene el tiempo, desactiva emociones y esclarece lo que la ignorancia intenta ocultar. Estimado Otoño, comienzas tu temporada este año, facilita lo que anhelo, y demuestra otra vez, que mi mente y tu ciencia, sólo uno son.

El tiempo de cosecha ha comenzado 

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